Museo de la Ciudad y Centro Cultural Usina Vieja

Centro Cultural

El Museo «Usina Vieja» nos invita a conocer la historia de San Antonio de Areco desde sus orígenes hasta la actualidad.
Pueblos originarios, geografía, historia social, economía, política, costumbres, cultura y deportes, son distintos momentos de nuestro recorrido.

Para sus habitantes, auténticos protagonistas de la historia, es la ocasión de conocer en profundidad su propio lugar. Para todos los visitantes, la posibilidad de descubrir una de las ciudades más pujantes de la Provincia de Buenos Aires, pionera en adelantos urbanísticos y emprendimientos económicos que favorecieron el desarrollo de la región pampeana.

La cultura urbana y las tradiciones están presentes a través de la exhibición de objetos donados por la comunidad, de los registros de las voces, las anécdotas y los recuerdos que conforman la memoria colectiva de Areco».

Historia del Museo La Usina Vieja

En 1901, se instaló la primera Usina de generación de energía eléctrica. Anteriormente, en 1871, la iluminación nocturna de las calles del pueblo no existía, a no ser que hubiera luna llena. En ese año se colocaron en las principales calles 75 faroles alimentados con aceite, que eran apagados a la medianoche para ahorrar combustible. Fue así que, para mejorar este servicio público, un grupo de vecinos creó una sociedad con el fin de generar electricidad.

Fueron instalados motores a vapor de uno y dos cilindros marca Rouston y F. Tossi, que generaban corriente continua. Eran alimentados al principio con carbón de piedra, luego con quebracho y por último con petroleo crudo. Este era almacenado en depósitos subterráneos, construidos a maneras de pilotes revestidos de portland los cuales pueden aún verse.

En 1928 la Usina fue comprada por la Sociedad de Sur Argentino, XEXA, que ilusionó a la población con la promesa de instalar una gran planta generadora en Zárate. La población se vio defraudada por esta empresa, ya que el proyecto no se concretó. Lo que se realizó fue el traslado desde otros pueblos de varias máquinas de mayor potencia que las que funcionaban, con lo que se abarató el costo del consumo.

En 1935 el suministro de energía era caro y deficiente, provocando malestar en la población. Fue así que el intendente municipal de aquel entonces, Don José Antonio Güiraldes rescindió el contrato con la compañía extranjera de capitales británicos y promovió la formación de una cooperativa. Contó con el apoyo unánime de la población y fue así como desde entonces hasta el presente, esa entidad sigue administrando la provisión de la energía eléctrica aunque no la genere en plantas propias.

En 1978 el ICOMOS da al edificio de la ex Usina el lugar que le corresponde en la historia de San Antonio de Areco, declarándolo «Monumento Arqueológico Industrial». Posteriormente, la municipalidad instala allí un Centro Cultural, que actualmente está en actividad.